Todos recibimos diariamente muchísima información del mundo que nos rodea y la mayor parte de esta información con mensajes negativos que influyen en la forma en que pensamos y nos sentimos.
Por ello, si quieres disfrutar de una mentalidad positiva debes tener en cuenta algunos factores y entrenarlo ¿preparada? Vamos allá.
Tenemos dos mentes
Lo primero que debes saber es que tienes dos mentes: la mente consciente y la mente subconsciente.
La mente consciente es la mente que “puedes escuchar”, son los pensamientos, creencias, ideas, recuerdos, conocimientos… que reconoces porque son los que estás percibiendo.
Y luego está la mente subconsciente. Desconocemos todo lo que hay en la mente subconsciente, por ello las creencias, recuerdos, aprendizajes que están en ella, decimos que están ocultos.
Están ocultos a nuestra conciencia, pero también están influyendo de forma muy potente en nuestro día a día y se revelan con frecuencia por ejemplo en la forma en que piensas, sientes o respondes ante determinadas situaciones.
Tus mentes se comunican entre ellas
Ambas mentes están en continua comunicación entre ellas, siempre están intercambiando información, por ello, para cultivar una mentalidad positiva debes entrenar las dos mentes.
Ambas mentes son muy poderosas y cada una de ellas tiene unas características diferentes.
Igual que un corazón no hace la digestión de tus comidas, ni tu estómago oxigena la sangre, ni tus pulmones la bombean… cada mente tiene sus habilidades y sus cometidos para que todo funcione a la perfección en tu vida.
No caigas en este error
Un gran error es creer que, porque la mente subconsciente no tienes las habilidades de la mente consciente, es menos fiable, poderosa, o beneficiosa para nosotros.
Ambas mentes son poderosas, ambas mentes son necesarias para una vida en balance y equilibrio.
Nuestra mente consciente no puede procesar el 100% de los datos que hay a nuestro alrededor. Ni bueno ni malo, sencillamente, no está preparada para hacerlo. Por eso la mente subconsciente es tan importante.
Ella se encarga de procesarlo todo y pasar a la mente consciente aquello que considera que es importante.
Por ejemplo: imagina lo que sería ser consciente de todas tus emociones y de las emociones de las personas que nos rodean. Poder sentir el dolor, la alegría, la frustración, la esperanza… de cada persona a tu alrededor…
Ahora imagina poder percibir cada olor por separado, cada sonido de tu entorno, cada imagen, absolutamente todos los datos de lo que sucede a tu alrededor… ¡sería agotador!
Por eso cada mente tiene sus funciones y los contenidos de la mente subconsciente nos quedan “como ocultos” porque son demasiados datos para que podamos procesarlos de manera consciente.
Para entrenar tu mentalidad positiva:
Es muy importante poner atención a ambas mentes.
Cada creencia, patrón de pensamiento aprendido, conductas grabadas a lo largo de toda tu vida y que han quedado automatizadas, son caminos que están grabados en tu mente subconsciente y que ahora mismo desconoces.
Pero puedes verlos reflejados en tu comportamiento y en tus respuestas a través de tu mente consciente.
Por ejemplo:
Te encuentras con esa amiga que siempre se queja y te encuentras quejándote tú también a pesar de que es algo que tienes muy trabajado y no haces en tu día a día.
¿Qué ha pasado?
Sigues teniendo un patrón de quejas grabado y ante alguien que se queja se ha desencadenado.
No, no lo mires con fastidio, en realidad es una oportunidad de llevar tu trabajo sobre la no queja a un siguiente nivel.
Prosigamos con el entrenamiento de una mentalidad positiva.
¿Qué debes hacer entonces?
Paso 1 para una mentalidad positiva.- Ten muy claro aquello que deseas conseguir:
En nuestro caso tener una mentalidad positiva.
Dedica unos minutos a trazar un mapa mental de lo que esto significa para ti.
Por ejemplo, para mí tener una mentalidad positiva significa tener pensamientos bonitos acerca de las cosas y situaciones que me rodean, conectar con la comprensión y la compasión cuando me encuentro con personas que , por un motivo u otro, me suponen un reto en mi vida (por ejem un reto de paciencia, un reto de aceptación, un reto de… ) y vivir ese aprendizaje que me ofrecen lo más posible desde el amor.
Enfocarme en la búsqueda de soluciones ante los retos de la vida. Reconocer las bendiciones que ya hay en mi día a día…
En definitiva, que mi forma de pensar y responder me aporte bienestar.
¿Qué significa para ti?
Paso 2 para una mentalidad positiva.- Lo ideal es trazar un plan de acción.
Si quieres ver un cambio en tu vida, te toca tomar acción sí o sí.
Por ello, planifica algunas acciones que te sean sencillas de realizar con frecuencia para ir cambiando la forma en que respondes.
Por ejemplo podrías trabajar con afirmaciones positivas, tener notas por casa que te recuerden cosas buenas, dejar tiempo en tu agenda para hacer actividades que te aportan felicidad, relajación…
Paso 3 para una mentalidad positiva .- Ten en cuenta que debes trabajar ambas mentes
Por tanto en tu plan de acción debe haber acciones que trabajen tu mente consciente (la que escuchas) y tu mente subconsciente.
De esta manera tu avance será equilibrado.
Paso 4 para una mentalidad positiva.- Rodéate de mensajes y personas positivas:
Apúntate a formaciones, escucha audios, sigue redes sociales con mensajes positivos que comiencen a alimentar tu positividad.
Busca rodearte también de personas que tengan una mentalidad positiva o que también quieran trabajarla, de esta manera podréis apoyaros juntas unas a otras.
¿Qué no hacer?
Dejarte vencer por los mensajes pesimistas de tu mente.
Si aún no has trabajado una mentalidad positiva es muy probable que tu mente ahora mismo te esté diciendo cosas como:
- Esto va a ser muy complicado
- A mí no me va a funcionar
- Yo no voy a saber
- Mejor abandono antes de comenzar
Sin duda cuando la mente no está entrenada para ser positiva tiene una capacidad que parece innata para hacernos abandonar sin ni siquiera intentar las cosas que creemos que son difíciles sin ni siquiera darles una oportunidad.
Pero una de las grandes ventajas de la mente es que siempre está recibiendo programación (tanto del mundo exterior como del mundo interior) y por eso tú puedes decir comenzar a introducirle una programación diferente y de esta forma, tu mente también responderá de forma diferente.
¿Y de verdad se puede?
Me considero un ejemplo viviente.
Hace años yo era sumamente negativa, viendo el vaso constantemente medio vacío y las cosas tan complicadas que ni siquiera daba un paso para intentarlas, abandonando antes de iniciar el viaje.
Veía a otras personas ser positivas a mi alrededor y pensaba “me encantaría poder ser positiva yo también” y comencé a trabajar en mi interior.
Fui desarrollando diversos poderes de mi mente consciente y otros de mi mente subconsciente y el resultado fue que mi mentalidad se transformó.
Y no sólo yo soy un ejemplo viviente, sino que lo mismo les ha pasado a muchos de mis alumnos.
Para saber más:
* Cómo aumentar tu poder personal
* Cómo usar tu pensamiento para cambiar emociones
* Desarrolla el Poder de tu Mente: 10 super poderes para transformar tu realidad
Espero que todos estos consejos te ayuden a dar tus primeros pasos hacia una mentalidad positiva que te ayude a ser más feliz cada día.
Lourdes Balestra.
Mentora de crecimiento personal y espiritual.